Los socialistas en el Ayuntamiento de Valencia amenazan con llevar a la Fiscalía al concejal de Fiestas de la capital, Santiago Ballester, del PP, si mantiene el concierto del grupo musical valenciano Los Meconios previsto el próximo día 25 en la programación de la Gran Fira de julio porque “hace apología del fascismo y promueve canciones con discursos machistas y de odio”, ha denunciado su portavoz Borja Sanjuan. Compromís ya alzó la voz el pasado 1 de julio por la contratación con fondos públicos de “un grupo ultra conocido por amplificar con parodias musicales las ideas de la extrema derecha”, aseguró entonces la edil Papi Robles. Y no son las únicas denuncias.
La Coordinadora Feminista de Valencia se quejó ante la Generalitat por el contenido de sus letras con mensajes que “contienen expresiones abiertamente machistas, misóginas y promotoras del odio hacia las mujeres”. El concejal de Fiestas, Santiago Ballester, del PP, responsable de la Gran Fira, considera la petición un acto de censura: “La hipocresía de los concejales socialistas es inmensa porque parece que la libertad de expresión y de creación artística sólo valga para sus acólitos”, ha replicado este miércoles.
La polémica se arrastra desde que se conoció el cartel de la Gran Fira, un certamen cultural que promueve todos los años el Ayuntamiento de la capital valenciana en el mes de julio. La portavoz de Compromís Papi Robles denunciaba a principios de mes “la deriva ultra” de la alcaldesa María José Catalá, que gobierna la capital en coalición con Vox, al contratar al grupo valenciano Los Meconios para un concierto gratuito —aunque al consistorio le costará 14.500 euros―, previsto al aire libre en los jardines del Palau el próximo 25 de julio por la noche. La concejala socialista Nuria Llopis censuró la contratación pública con parecidas críticas.
La Coordinadora Feminista de Valencia también alzó la voz contra la actuación y en un escrito dirigido al comisionado para la Lucha contra la Violencia sobre la Mujer de la Generalitat, Felipe del Baño, pidió al Consell que “a través de todos los mecanismos de que disponga (traslado a la Fiscalía, denuncia en la Guardia Civil, demanda en los tribunales…) frene este despropósito en el que, con dinero público, se insulta y denigra a las mujeres en un acto de gran tradición festiva en la ciudad de Valencia”.
La plataforma feminista alegaba que las canciones de este grupo “tienen un contenido intencionadamente machista y, entre otros mensajes claramente hostiles, emiten uno que preocupa sobremanera: la propagación del odio hacia las mujeres”. Pone como ejemplo letras como: “Yo soy machista Deja el cotilleo y tráeme una birra; Yo soy machista Vete a la cocina y haz la comida Soy hombre y traigo el sueldo a casa No tiene queja, no le falta de nada En casa no pego ni chapa A cuerpo rey, todo lo hace mi esclava”. Advierten de que este tipo de letras “no solo perpetúan estereotipos y roles de género discriminatorios, sino que contribuyen a la normalización social de la violencia y el desprecio hacia las mujeres, en clara contradicción con los valores y principios recogidos en la legislación autonómica y estatal sobre igualdad y prevención de la violencia de género, y en clara contradicción también con el cometido del comisionado para la Lucha contra la Violencia sobre la Mujer”.
Los socialistas también amenazan con denunciarlos y se amparan en la presunta comisión de un delito de malversación de fondos públicos y otro de odio si se mantiene la actuación. El portavoz Borja Sanjuan ha desvelado que el Gobierno local de Catalá va a gastar 14.500 euros de dinero público en este concierto: “El Ayuntamiento les va a pagar el doble de lo que paga al resto de grupos contratados. Parece que si promueves la discriminación y el odio, el gobierno de Catalá te lo compensa pagándote el doble”, ha señalado. El responsable socialista ha vuelto a pedir que se suspenda el concierto previsto porque se utilizan recursos públicos para fomentar el odio y, en el caso de no hacerlo, ha adelantado que se interpondrán denuncias contra el propio grupo si canta canciones que promuevan el odio y al concejal responsable de su contratación si Los Meconios cometen un delito durante su actuación.
La edil, también socialista, Nuria Llopis ha afeado además la doble vara de medir del PP en la comisión de Cultura celebrada este martes y donde sus concejales, a pesar de reconocer que las letras de sus canciones eran denigrantes, rechazaron la moción de los socialistas para suspender esta actuación.
El concejal Santiago Ballester insiste en que le resulta “vergonzoso que pretendan que censuremos a unos cómicos que utilizan el humor para sus actuaciones cuando ellos, en muchos ayuntamientos que gobiernan y en la propia Generalitat en la etapa de Ximo Puig como presidente, contrataron a grupos y humoristas que denigraban a mujeres por ser del PP o por haber sido elegidas democráticamente por la inmensa mayoría de valencianos”, ha señalado. “Nosotros no pedimos a los socialistas que censuren ninguna actuación”, ha proseguido Ballester. “Estamos en contra de cualquier forma de censura contra la creatividad artística. Respetamos la libertad de expresión de todo el mundo, aunque no compartamos la misma opinión”.
Y ha añadido que la libertad de expresión es un derecho fundamental de todos, “no sólo de unos cuantos como quiere el señor Sanjuan”. “El problema que tienen los socialistas es que la Constitución no acaba de agradarles como está ahora. Y pretenden recortarnos derechos y romper la igualdad de los españoles. Eso sí que debería de verdad preocupar a los concejales socialistas, y no que se utilice el humor para hacer una reflexión sobre el mundo actual”, ha concluido Ballester.
El grupo Los Meconios emitió hace unos días un comunicado y unos vídeos por redes sociales en los que negaban haber incitado el acoso a nadie. Sobre las acusaciones de machismo y misoginia, aseguran: “Nosotros preferimos decir que cantamos a favor de la igualdad real”. Y añaden que “jamás hemos faltado el respeto a nadie por su orientación sexual. Intentar cancelar un concierto porque a ti no te gusta, sí que es fascista”, decían. El grupo asegura que la polémica canción Vamos a volver al 36 no la van a cantar en Valencia, es del grupo InfoVlogger y no es guerracivilista, sino que va contra un Gobierno, “obsesionado con el pasado” y que polariza a la sociedad, en referencia al ejecutivo del socialista Pedro Sánchez. La canción saltó a los medios de comunicación cuando la cantaron en 2022 en un festival organizado por Vox.
Los socialistas en el Ayuntamiento de Valencia amenazan con llevar a la Fiscalía al concejal de Fiestas de la capital, Santiago Ballester, del PP, si mantiene el concierto del grupo musical valenciano Los Meconios previsto el próximo día 25 en la programación de la Gran Fira de julio porque “hace apología del fascismo y promueve canciones con discursos machistas y de odio”, ha denunciado su portavoz Borja Sanjuan. Compromís ya alzó la voz el pasado 1 de julio por la contratación con fondos públicos de “un grupo ultra conocido por amplificar con parodias musicales las ideas de la extrema derecha”, aseguró entonces la edil Papi Robles. Y no son las únicas denuncias. La Coordinadora Feminista de Valencia se quejó ante la Generalitat por el contenido de sus letras con mensajes que “contienen expresiones abiertamente machistas, misóginas y promotoras del odio hacia las mujeres”. El concejal de Fiestas, Santiago Ballester, del PP, responsable de la Gran Fira, considera la petición un acto de censura: “La hipocresía de los concejales socialistas es inmensa porque parece que la libertad de expresión y de creación artística sólo valga para sus acólitos”, ha replicado este miércoles.La polémica se arrastra desde que se conoció el cartel de la Gran Fira, un certamen cultural que promueve todos los años el Ayuntamiento de la capital valenciana en el mes de julio. La portavoz de Compromís Papi Robles denunciaba a principios de mes “la deriva ultra” de la alcaldesa María José Catalá, que gobierna la capital en coalición con Vox, al contratar al grupo valenciano Los Meconios para un concierto gratuito —aunque al consistorio le costará 14.500 euros―, previsto al aire libre en los jardines del Palau el próximo 25 de julio por la noche. La concejala socialista Nuria Llopis censuró la contratación pública con parecidas críticas. La Coordinadora Feminista de Valencia también alzó la voz contra la actuación y en un escrito dirigido al comisionado para la Lucha contra la Violencia sobre la Mujer de la Generalitat, Felipe del Baño, pidió al Consell que “a través de todos los mecanismos de que disponga (traslado a la Fiscalía, denuncia en la Guardia Civil, demanda en los tribunales…) frene este despropósito en el que, con dinero público, se insulta y denigra a las mujeres en un acto de gran tradición festiva en la ciudad de Valencia”.La plataforma feminista alegaba que las canciones de este grupo “tienen un contenido intencionadamente machista y, entre otros mensajes claramente hostiles, emiten uno que preocupa sobremanera: la propagación del odio hacia las mujeres”. Pone como ejemplo letras como: “Yo soy machista Deja el cotilleo y tráeme una birra; Yo soy machista Vete a la cocina y haz la comida Soy hombre y traigo el sueldo a casa No tiene queja, no le falta de nada En casa no pego ni chapa A cuerpo rey, todo lo hace mi esclava”. Advierten de que este tipo de letras “no solo perpetúan estereotipos y roles de género discriminatorios, sino que contribuyen a la normalización social de la violencia y el desprecio hacia las mujeres, en clara contradicción con los valores y principios recogidos en la legislación autonómica y estatal sobre igualdad y prevención de la violencia de género, y en clara contradicción también con el cometido del comisionado para la Lucha contra la Violencia sobre la Mujer”.Los socialistas también amenazan con denunciarlos y se amparan en la presunta comisión de un delito de malversación de fondos públicos y otro de odio si se mantiene la actuación. El portavoz Borja Sanjuan ha desvelado que el Gobierno local de Catalá va a gastar 14.500 euros de dinero público en este concierto: “El Ayuntamiento les va a pagar el doble de lo que paga al resto de grupos contratados. Parece que si promueves la discriminación y el odio, el gobierno de Catalá te lo compensa pagándote el doble”, ha señalado. El responsable socialista ha vuelto a pedir que se suspenda el concierto previsto porque se utilizan recursos públicos para fomentar el odio y, en el caso de no hacerlo, ha adelantado que se interpondrán denuncias contra el propio grupo si canta canciones que promuevan el odio y al concejal responsable de su contratación si Los Meconios cometen un delito durante su actuación. La edil, también socialista, Nuria Llopis ha afeado además la doble vara de medir del PP en la comisión de Cultura celebrada este martes y donde sus concejales, a pesar de reconocer que las letras de sus canciones eran denigrantes, rechazaron la moción de los socialistas para suspender esta actuación.El concejal Santiago Ballester insiste en que le resulta “vergonzoso que pretendan que censuremos a unos cómicos que utilizan el humor para sus actuaciones cuando ellos, en muchos ayuntamientos que gobiernan y en la propia Generalitat en la etapa de Ximo Puig como presidente, contrataron a grupos y humoristas que denigraban a mujeres por ser del PP o por haber sido elegidas democráticamente por la inmensa mayoría de valencianos”, ha señalado. “Nosotros no pedimos a los socialistas que censuren ninguna actuación”, ha proseguido Ballester. “Estamos en contra de cualquier forma de censura contra la creatividad artística. Respetamos la libertad de expresión de todo el mundo, aunque no compartamos la misma opinión”.Y ha añadido que la libertad de expresión es un derecho fundamental de todos, “no sólo de unos cuantos como quiere el señor Sanjuan”. “El problema que tienen los socialistas es que la Constitución no acaba de agradarles como está ahora. Y pretenden recortarnos derechos y romper la igualdad de los españoles. Eso sí que debería de verdad preocupar a los concejales socialistas, y no que se utilice el humor para hacer una reflexión sobre el mundo actual”, ha concluido Ballester.El grupo Los Meconios emitió hace unos días un comunicado y unos vídeos por redes sociales en los que negaban haber incitado el acoso a nadie. Sobre las acusaciones de machismo y misoginia, aseguran: “Nosotros preferimos decir que cantamos a favor de la igualdad real”. Y añaden que “jamás hemos faltado el respeto a nadie por su orientación sexual. Intentar cancelar un concierto porque a ti no te gusta, sí que es fascista”, decían. El grupo asegura que la polémica canción Vamos a volver al 36 no la van a cantar en Valencia, es del grupo InfoVlogger y no es guerracivilista, sino que va contra un Gobierno, “obsesionado con el pasado” y que polariza a la sociedad, en referencia al ejecutivo del socialista Pedro Sánchez. La canción saltó a los medios de comunicación cuando la cantaron en 2022 en un festival organizado por Vox. Seguir leyendo
Los socialistas en el Ayuntamiento de Valencia amenazan con llevar a la Fiscalía al concejal de Fiestas de la capital, Santiago Ballester, del PP, si mantiene el concierto del grupo musical valenciano Los Meconios previsto el próximo día 25 en la programación de la Gran Fira de julio porque “hace apología del fascismo y promueve canciones con discursos machistas y de odio”, ha denunciado su portavoz Borja Sanjuan. Compromís ya alzó la voz el pasado 1 de julio por la contratación con fondos públicos de “un grupo ultra conocido por amplificar con parodias musicales las ideas de la extrema derecha”, aseguró entonces la edil Papi Robles. Y no son las únicas denuncias.
La Coordinadora Feminista de Valencia se quejó ante la Generalitat por el contenido de sus letras con mensajes que “contienen expresiones abiertamente machistas, misóginas y promotoras del odio hacia las mujeres”. El concejal de Fiestas, Santiago Ballester, del PP, responsable de la Gran Fira, considera la petición un acto de censura: “La hipocresía de los concejales socialistas es inmensa porque parece que la libertad de expresión y de creación artística sólo valga para sus acólitos”, ha replicado este miércoles.
La polémica se arrastra desde que se conoció el cartel de la Gran Fira, un certamen cultural que promueve todos los años el Ayuntamiento de la capital valenciana en el mes de julio. La portavoz de Compromís Papi Robles denunciaba a principios de mes “la deriva ultra” de la alcaldesa María José Catalá, que gobierna la capital en coalición con Vox, al contratar al grupo valenciano Los Meconios para un concierto gratuito —aunque al consistorio le costará 14.500 euros―, previsto al aire libre en los jardines del Palau el próximo 25 de julio por la noche. La concejala socialista Nuria Llopis censuró la contratación pública con parecidas críticas.
La Coordinadora Feminista de Valencia también alzó la voz contra la actuación y en un escrito dirigido al comisionado para la Lucha contra la Violencia sobre la Mujer de la Generalitat, Felipe del Baño, pidió al Consell que “a través de todos los mecanismos de que disponga (traslado a la Fiscalía, denuncia en la Guardia Civil, demanda en los tribunales…) frene este despropósito en el que, con dinero público, se insulta y denigra a las mujeres en un acto de gran tradición festiva en la ciudad de Valencia”.
La plataforma feminista alegaba que las canciones de este grupo “tienen un contenido intencionadamente machista y, entre otros mensajes claramente hostiles, emiten uno que preocupa sobremanera: la propagación del odio hacia las mujeres”. Pone como ejemplo letras como: “Yo soy machista Deja el cotilleo y tráeme una birra; Yo soy machista Vete a la cocina y haz la comida Soy hombre y traigo el sueldo a casa No tiene queja, no le falta de nada En casa no pego ni chapa A cuerpo rey, todo lo hace mi esclava”. Advierten de que este tipo de letras “no solo perpetúan estereotipos y roles de género discriminatorios, sino que contribuyen a la normalización social de la violencia y el desprecio hacia las mujeres, en clara contradicción con los valores y principios recogidos en la legislación autonómica y estatal sobre igualdad y prevención de la violencia de género, y en clara contradicción también con el cometido del comisionado para la Lucha contra la Violencia sobre la Mujer”.
Los socialistas también amenazan con denunciarlos y se amparan en la presunta comisión de un delito de malversación de fondos públicos y otro de odio si se mantiene la actuación. El portavoz Borja Sanjuan ha desvelado que el Gobierno local de Catalá va a gastar 14.500 euros de dinero público en este concierto: “El Ayuntamiento les va a pagar el doble de lo que paga al resto de grupos contratados. Parece que si promueves la discriminación y el odio, el gobierno de Catalá te lo compensa pagándote el doble”, ha señalado. El responsable socialista ha vuelto a pedir que se suspenda el concierto previsto porque se utilizan recursos públicos para fomentar el odio y, en el caso de no hacerlo, ha adelantado que se interpondrán denuncias contra el propio grupo si canta canciones que promuevan el odio y al concejal responsable de su contratación si Los Meconios cometen un delito durante su actuación.
La edil, también socialista, Nuria Llopis ha afeado además la doble vara de medir del PP en la comisión de Cultura celebrada este martes y donde sus concejales, a pesar de reconocer que las letras de sus canciones eran denigrantes, rechazaron la moción de los socialistas para suspender esta actuación.
El concejal Santiago Ballester insiste en que le resulta “vergonzoso que pretendan que censuremos a unos cómicos que utilizan el humor para sus actuaciones cuando ellos, en muchos ayuntamientos que gobiernan y en la propia Generalitat en la etapa de Ximo Puig como presidente, contrataron a grupos y humoristas que denigraban a mujeres por ser del PP o por haber sido elegidas democráticamente por la inmensa mayoría de valencianos”, ha señalado. “Nosotros no pedimos a los socialistas que censuren ninguna actuación”, ha proseguido Ballester. “Estamos en contra de cualquier forma de censura contra la creatividad artística. Respetamos la libertad de expresión de todo el mundo, aunque no compartamos la misma opinión”.
Y ha añadido que la libertad de expresión es un derecho fundamental de todos, “no sólo de unos cuantos como quiere el señor Sanjuan”. “El problema que tienen los socialistas es que la Constitución no acaba de agradarles como está ahora. Y pretenden recortarnos derechos y romper la igualdad de los españoles. Eso sí que debería de verdad preocupar a los concejales socialistas, y no que se utilice el humor para hacer una reflexión sobre el mundo actual”, ha concluido Ballester.
El grupo Los Meconios emitió hace unos días un comunicado y unos vídeos por redes sociales en los que negaban haber incitado el acoso a nadie. Sobre las acusaciones de machismo y misoginia, aseguran: “Nosotros preferimos decir que cantamos a favor de la igualdad real”. Y añaden que “jamás hemos faltado el respeto a nadie por su orientación sexual. Intentar cancelar un concierto porque a ti no te gusta, sí que es fascista”, decían. El grupo asegura que la polémica canción Vamos a volver al 36no la van a cantar en Valencia, es del grupo InfoVlogger y no es guerracivilista, sino que va contra un Gobierno, “obsesionado con el pasado” y que polariza a la sociedad, en referencia al ejecutivo del socialista Pedro Sánchez. La canción saltó a los medios de comunicación cuando la cantaron en 2022 en un festival organizado por Vox.
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