De nuevo por sorpresa, de nuevo solo con unas horas de antelación, de nuevo a través de Instagram y de nuevo, con algunas vallas publicitarias repartidas por el mundo como toda promoción. Justin Bieber se repite menos de dos meses después: tras cuatro años sin lanzar nueva música, ahora lanza un segundo álbum por sorpresa, Swag II, el que se prevé como continuación de Swag, que publicó el pasado 11 de julio.
Con solo siete semanas de separación de la primera parte, Swag II se convertirá en el octavo disco de estudio del canadiense, de 31 años. Así lo deja ver una publicación que ha hecho este jueves en sus siempre agitadas redes sociales, donde apenas se ve un círculo rosa con una forma geométrica (la misma que lleva usando meses con su firma de moda y complementos, Skylrk) y una frase donde se lee: “II night at midnight”, un juego de palabras que deja ver que esa segunda parte llegará el jueves a medianoche, es decir, ya el viernes, siendo este el día habitual de lanzamientos musicales a nivel global. Por el momento no se ha desvelado cuántas canciones —el anterior tenía 21— tendrá ni ningún sonido del mismo.
Además, el cantante ha llenado su cuenta de Instagram, donde es muy activo, de pistas de Swag II, cuyo color principal es un rosa pastel que contrasta con el blanco y negro del primer álbum. También ha mostrado edificios y vallas publicitarias con el álbum en distintos puntos del planeta, de Nueva York y París al Monte Rushmore. Además, Bieber y su esposa, la empresaria cosmética Hailey Bieber, aparecen en una nueva fotografía promocional en familia junto a su hijo de un año, Jack Blues.
La expectación con Swag fue grande, pero no parece haber salpicado a Swag II, cuyo lanzamiento no acapara la atención ni la conversación; ni siquiera ha entrado entre las 30 principales tendencias en X en Estados Unidos. Los medios especializados prevén que, como en ese primer disco, Bieber dé un cierto giro a su estilo musical. Así lo hizo en Swag, con temas centrados en sus experiencias personales, en la salud mental, su fe y su familia; de hecho, es el primer disco que Bieber publicaba tras ser padre en verano de 2024.
Fuentes cercanas a Bieber ya habían desvelado que el cantante tenía más música tras el lanzamiento de Swag, que llegó a entrar al número 2 de la lista Billboard. Para la publicación especializada, el disco se clasificaba como de R&B, y de hecho en esa tabla concreta llegó a alcanzar la primera posición. Pero ya advierten de que este inminente álbum tendrá toques mucho más pop. Si el primer disco sí clasifica para entrar en la elección de los premios Grammy del próximo año, en cambio, este segundo no, porque la puerta de entrada se cerró el 30 de agosto, por lo que ya irá a la competición de 2027.
Swag y Swag II van de la mano con la discográfica Def Jam Records, con la que tiene pactados otros dos álbumes más, y son los primeros tras la venta de su catálogo musical hace dos años y medio, por el que recibió alrededor de 200 millones de dólares. Un dinero que le sirvió para hacer frente a un gasto inesperado, porque en 2022, un año antes, había arrancado una gira que tuvo que paralizar por motivos de salud, tras sufrir una parálisis facial. La cancelación le obligó a devolverle a la promotora 24 millones de dólares (le habían adelantado 40), que no tenía y se vio obligado a pedir a su mánager, el empresario Scooter Braun.
Aquello supuso un problema: según se ha sabido hace pocos meses, Bieber nunca le devolvió ese dinero (solo la primera cuota), al afirmar que Braun le debía millones. Pero una auditoría independiente encargada por Braun y su equipo desveló que era lo contrario, y que era el cantante quien le debía nada menos que nueve millones de dólares. Al parecer, estos días, entre el lanzamiento del álbum y la venta de Rhode, la marca cosmética de su esposa, a la firma e.l.f. por mil millones de dólares, el capital ha vuelto a fluir en casa Bieber.
Solo siete semanas después del anterior, ‘Swag’, el cantante canadiense ha anunciado en sus redes sociales el que será su octavo álbum de estudio
El cantante canadiense ha anunciado en sus redes sociales el que será su octavo álbum de estudio
De nuevo por sorpresa, de nuevo solo con unas horas de antelación, de nuevo a través de Instagram y de nuevo, con algunas vallas publicitarias repartidas por el mundo como toda promoción. Justin Bieber se repite menos de dos meses después: tras cuatro años sin lanzar nueva música, ahora lanza un segundo álbum por sorpresa, Swag II, el que se prevé como continuación de Swag, que publicó el pasado 11 de julio.
Con solo siete semanas de separación de la primera parte, Swag II se convertirá en el octavo disco de estudio del canadiense, de 31 años. Así lo deja ver una publicación que ha hecho este jueves en sus siempre agitadas redes sociales, donde apenas se ve un círculo rosa con una forma geométrica (la misma que lleva usando meses con su firma de moda y complementos, Skylrk) y una frase donde se lee: “II night at midnight”, un juego de palabras que deja ver que esa segunda parte llegará el jueves a medianoche, es decir, ya el viernes, siendo este el día habitual de lanzamientos musicales a nivel global. Por el momento no se ha desvelado cuántas canciones —el anterior tenía 21— tendrá ni ningún sonido del mismo.
Además, el cantante ha llenado su cuenta de Instagram, donde es muy activo, de pistas de Swag II, cuyo color principal es un rosa pastel que contrasta con el blanco y negro del primer álbum. También ha mostrado edificios y vallas publicitarias con el álbum en distintos puntos del planeta, de Nueva York y París al Monte Rushmore. Además, Bieber y su esposa, la empresaria cosmética Hailey Bieber, aparecen en una nueva fotografía promocional en familia junto a su hijo de un año, Jack Blues.
La expectación con Swag fue grande, pero no parece haber salpicado a Swag II, cuyo lanzamiento no acapara la atención ni la conversación; ni siquiera ha entrado entre las 30 principales tendencias en X en Estados Unidos. Los medios especializados prevén que, como en ese primer disco, Bieber dé un cierto giro a su estilo musical. Así lo hizo en Swag, con temas centrados en sus experiencias personales, en la salud mental, su fe y su familia; de hecho, es el primer disco que Bieber publicaba tras ser padre en verano de 2024.
Fuentes cercanas a Bieber ya habían desvelado que el cantante tenía más música tras el lanzamiento de Swag, que llegó a entrar al número 2 de la lista Billboard. Para la publicación especializada, el disco se clasificaba como de R&B, y de hecho en esa tabla concreta llegó a alcanzar la primera posición. Pero ya advierten de que este inminente álbum tendrá toques mucho más pop. Si el primer disco sí clasifica para entrar en la elección de los premios Grammy del próximo año, en cambio, este segundo no, porque la puerta de entrada se cerró el 30 de agosto, por lo que ya irá a la competición de 2027.
Swag y Swag II van de la mano con la discográfica Def Jam Records, con la que tiene pactados otros dos álbumes más, y son los primeros tras la venta de su catálogo musical hace dos años y medio, por el que recibió alrededor de 200 millones de dólares. Un dinero que le sirvió para hacer frente a un gasto inesperado, porque en 2022, un año antes, había arrancado una gira que tuvo que paralizar por motivos de salud, tras sufrir una parálisis facial. La cancelación le obligó a devolverle a la promotora 24 millones de dólares (le habían adelantado 40), que no tenía y se vio obligado a pedir a su mánager, el empresario Scooter Braun.
Aquello supuso un problema: según se ha sabido hace pocos meses, Bieber nunca le devolvió ese dinero (solo la primera cuota), al afirmar que Braun le debía millones. Pero una auditoría independiente encargada por Braun y su equipo desveló que era lo contrario, y que era el cantante quien le debía nada menos que nueve millones de dólares. Al parecer, estos días, entre el lanzamiento del álbum y la venta de Rhode, la marca cosmética de su esposa, a la firma e.l.f. por mil millones de dólares, el capital ha vuelto a fluir en casa Bieber.
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Sobre la firma
Es corresponsal en Los Ángeles (California), donde vive en y escribe sobre Hollywood y sus rutilantes estrellas. En Madrid ha coordinado la sección de Gente y Estilo de Vida. Licenciada en Periodismo y Comunicación Audiovisual, Máster de Periodismo UAM-EL PAÍS, lleva más de una década vinculada a Prisa, pasando por Cadena Ser, SModa y ElHuffPost.
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