Coachella 2025 no solo es un evento musical: es una experiencia completa de arte, moda, influencers, celebridades y vibras inolvidables desde que se pusiera de moda en la década de 2010s con celebrities y artistas como Kylie Jenner, Vanessa Hudgens o Selena Gómez, acudiendo con sus super-boho-chic-cowboy-brilli-brilli-styled outfits.
Este año, además, el festival destacó de nuevo por el icónico regreso de Lady Gaga y actuaciones de artistas como Green Day, Post Malone, Charli XCX, Missy Elliott o Benson Boone. También hemos podido disfrutar de la presencia de varias figuras reconocidas de la música latina e hispana en el festival como Ca7riel y Paco Amoroso, Junior H invitando a Peso Pluma y Tito Double P, o The Marías, entre otros.
Pero más allá del cartel, hay una pregunta que todos se hacen mientras scrollean la infinitud de vídeos sobre el festival que nos regalan asistentes e influencers: ¿cuánto cuesta realmente asistir a Coachella?
¿Cuánto dinero cuestan los boletos y el alojamiento en Coachella?
Los pases generales comienzan en 599 dólares, con acceso a los tres días del festival y aparcamiento estándar incluido. Si buscas una experiencia más cómoda, el pase VIP cuesta unos 1.199 dólares, con acceso a zonas exclusivas, baños más limpios y mejores vistas. También puedes sumar un pase de transporte oficial (shuttle) desde hoteles o puntos designados por alrededor de 679 dólares, ideal si no planeas acampar.
El camping es la opción más “económica”. Los pases para el camping con coche cuestan unos 160 dólares. Si prefieres una camper, prepara unos 2.900 dólares mínimo, mientras que los paquetes de acampada con todo incluido rondan los 2.400 dólares. Si buscas más comodidad, dormir en un hotel durante el festival puede superar fácilmente los 5.000 dólares, llegando incluso a 10.000 dólares según la ubicación y el lujo.
Coste total estimado: ¿de verdad vale la pena?
Sumando transporte, entradas, alojamiento, comida y extras, ir a Coachella puede costar entre 2.500 y más de 7.000 dólares por persona. Si vas con el presupuesto ajustado, es decir, camping ($160), pase general ($599), comida básica ($150), podrías gastar en torno a $2.500–$3.000.
Si deseas mejorar la experiencia, yendo a un hotel, glamping o adquiriendo un pase VIP ($1.199), o ticket shuttle ($150), más comidas en el sitio… podríamos estar hablando de un presupuesto de $4.000 a $5.000, que podría ascender a los $10.000.
Estas estimaciones no incluyen los billetes de avión o transporte hasta Indio, por lo que tendrías que añadirlo aparte.
5 consejos para ahorrar (y seguir viviendo la experiencia)
Si sueñas con ir a Coachella el año que viene pero no quieres quedarte en bancarrota, tienes varias opciones. La primera, hacerte influencer, ya que las marcas costean toda o la mayor parte del viaje. Si ya vas tarde para eso, estos tips pueden ayudarte a ahorrar sin perder la magia.
Lo primero es ahorrar en alojamiento: acampar en el recinto es más barato y además te acerca a otros festivaleros. Eso sí, vale la pena invertir en un transporte hasta el festival, ya que otros años los asistentes se han quejado de tener que hacer largas caminatas hasta llegar al lugar. Y volver en un taxi o Uber al acabar el evento parece imposible.
Otro consejo habitual, pero que no hay que dejar de tener en cuenta, es comprar las entradas con antelación, ya que los precios van subiendo, y las del primer fin de semana suelen ser más caras. Evita comprar en webs de terceros para ahorrarte estafas y sorpresas.
Lleva tu propia comida y bebida. La comida del festival es buena, pero bastante cara (puedes encontrar sándwiches por más de $20). Si acampas, puedes llevar snacks, bebidas y recortar bastante presupuesto.
Crea tus propios looks festivaleros: no necesitas gastar cientos de dólares en ropa. Recicla prendas, compra en tiendas de segunda mano o haz tu propio outfit. En redes sociales dispones de una infinidad de tutoriales.
El festival, uno de los más icónicos del mundo, acaba de culminar. Como cada año, se ha vuelto a debatir el coste de sus entradas
Coachella 2025 no solo es un evento musical: es una experiencia completa de arte, moda, influencers, celebridades y vibras inolvidables desde que se pusiera de moda en la década de 2010s con celebrities y artistas como Kylie Jenner, Vanessa Hudgens o Selena Gómez, acudiendo con sus super-boho-chic-cowboy-brilli-brilli-styled outfits.
Este año, además, el festival destacó de nuevo por el icónico regreso de Lady Gaga y actuaciones de artistas como Green Day, Post Malone, Charli XCX, Missy Elliott o Benson Boone. También hemos podido disfrutar de la presencia de varias figuras reconocidas de la música latina e hispana en el festival como Ca7riel y Paco Amoroso, Junior H invitando a Peso Pluma y Tito Double P, o The Marías, entre otros.
Pero más allá del cartel, hay una pregunta que todos se hacen mientras scrollean la infinitud de vídeos sobre el festival que nos regalan asistentes e influencers: ¿cuánto cuesta realmente asistir a Coachella?
¿Cuánto dinero cuestan los boletos y el alojamiento en Coachella?
Los pases generales comienzan en 599 dólares, con acceso a los tres días del festival y aparcamiento estándar incluido. Si buscas una experiencia más cómoda, el pase VIP cuesta unos 1.199 dólares, con acceso a zonas exclusivas, baños más limpios y mejores vistas. También puedes sumar un pase de transporte oficial (shuttle) desde hoteles o puntos designados por alrededor de 679 dólares, ideal si no planeas acampar.
El camping es la opción más “económica”. Los pases para el camping con coche cuestan unos 160 dólares. Si prefieres una camper, prepara unos 2.900 dólares mínimo, mientras que los paquetes de acampada con todo incluido rondan los 2.400 dólares. Si buscas más comodidad, dormir en un hotel durante el festival puede superar fácilmente los 5.000 dólares, llegando incluso a 10.000 dólares según la ubicación y el lujo.
Coste total estimado: ¿de verdad vale la pena?
Sumando transporte, entradas, alojamiento, comida y extras, ir a Coachella puede costar entre 2.500 y más de 7.000 dólares por persona. Si vas con el presupuesto ajustado, es decir, camping ($160), pase general ($599), comida básica ($150), podrías gastar en torno a $2.500–$3.000.
Si deseas mejorar la experiencia, yendo a un hotel, glamping o adquiriendo un pase VIP ($1.199), o ticket shuttle ($150), más comidas en el sitio… podríamos estar hablando de un presupuesto de $4.000 a $5.000, que podría ascender a los $10.000.
Estas estimaciones no incluyen los billetes de avión o transporte hasta Indio, por lo que tendrías que añadirlo aparte.
5 consejos para ahorrar (y seguir viviendo la experiencia)
Si sueñas con ir a Coachella el año que viene pero no quieres quedarte en bancarrota, tienes varias opciones. La primera, hacerte influencer, ya que las marcas costean toda o la mayor parte del viaje. Si ya vas tarde para eso, estos tips pueden ayudarte a ahorrar sin perder la magia.
Lo primero es ahorrar en alojamiento: acampar en el recinto es más barato y además te acerca a otros festivaleros. Eso sí, vale la pena invertir en un transporte hasta el festival, ya que otros años los asistentes se han quejado de tener que hacer largas caminatas hasta llegar al lugar. Y volver en un taxi o Uber al acabar el evento parece imposible.
Otro consejo habitual, pero que no hay que dejar de tener en cuenta, es comprar las entradas con antelación, ya que los precios van subiendo, y las del primer fin de semana suelen ser más caras. Evita comprar en webs de terceros para ahorrarte estafas y sorpresas.
Lleva tu propia comida y bebida. La comida del festival es buena, pero bastante cara (puedes encontrar sándwiches por más de $20). Si acampas, puedes llevar snacks, bebidas y recortar bastante presupuesto.
Crea tus propios looks festivaleros: no necesitas gastar cientos de dólares en ropa. Recicla prendas, compra en tiendas de segunda mano o haz tu propio outfit. En redes sociales dispones de una infinidad de tutoriales.
EL PAÍS