En 2025, el Instituto Cervantes ha registrado 30 millones más de hablantes del español, un 5% más que el años anterior y por tanto la cifra total de personas con las que compartimos la lengua española sería de 630 millones potenciales. De ellos, 520 millones la tienen como lengua nativa, siendo el la tercera mayor del mundo, por detrás del chino y el hindi. Pero el español es más internacional, sin duda, ya que uno de cada diez hablantes nativos de español reside en países no hispanohablantes. El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, presentó ayer el anuario ‘El español en el mundo’, que edita el Instituto Cervantes. Le acompañaban su director, Luis García Montero, junto a los responsables de la publicación.Un informe más políticoEntre las novedades del Anuario 2025 destaca la incorporación de factores de la agenda política que el informe asocia a la lengua, como los «valores democráticos» o el «patriarcado». En los artículo reunidos bajo el título de «El español como expresión de valores democráticos» figuran textos como el que se centra en el machismo de la Constitución Española de 1978, de Ruth Rubio y Octavio Salazar, que van más allá de la lengua en sus análisis, incorporando debates de otros ámbitos. «Queríamos dar un paso más y no limitarnos al análisis lingüístico tradicional», ha dicho la catedrática de la Universidad de Sevilla, Ruth Rubio. Para ella «la Constitución sí es machista, totalmente», tal vez como la época en la que se redactó, y por eso «hay padres de la Constitución pero nunca se habla de las mujeres que participaron, no tiene madres». El texto analiza algunos aspectos de las expresiones utilizadas en la Carta Magna (les llaman la atención, por ejemplo que haya ‘reina consorte’ y ‘consorte de la reina’ en lugar de ‘rey consorte’), y también la ausencia de otros términos, como ‘cuidados’, que hoy seguramente serían incorporados, pero advierte que insistir en estos debates convierten estos temas en materia constitucional. La especialista va más allá cuando constata también que hay términos inventados como ‘ideología de género’, «en los que se mete todo lo que molesta a la familia tradicional», en un contexto global de ataques del movimiento ‘antigénero’ alentados por un ‘Trumpismo 2.0’, así definido.También con un mayor sesgo político, figuran estudios sobre el lenguaje claro, así como el papel de los medios y los bulos en la comunicación política o los sesgos de desigualdad en la Inteligencia Artificial. García Montero defendió este desarrollo de asuntos de la esfera pública en el estudio del idioma que hace el Cervantes anualmente, algo que «dibuja una imagen multifacética de la presencia del español» y ayuda «a la responsabilidad de los periodistas para no dejarse arrastrar en un mundo de bulos y falsas noticias».La lengua que uneEl director del Cervantes recibió también el espaldarazo del Gobierno que supone la presencia del ministro de Exteriores en el acto, después del conflicto generado en Arequipa. García Montero dijo al respecto que «el Cervantes hace su trabajo y se relaciona con la RAE, no ha roto ningún puente con la Academia, pero parece que molestó porque dije que prefería un filólogo al frente de la Academia».Albares valoró el anuario como una herramienta de diagnóstico, una publicación indispensable para conocer el estado de nuestra lengua. «La nuestra no es solo una lengua de cultura, también tiene un enorme valor político, geoestratégico y económico», dijo.«El español se ha hecho fuerte desde la diferencia y la inclusión y por ello constituye una reserva de los valores democráticos –añadió–. Una lengua es más que un código, también es un formidable vehículo para trasladar valores. Las lenguas deben ser siempre motivos de unión y nunca de discordia, deben acercar y no separar, y es lo que ha conseguido el español», subrayó. Y antes: «Tenemos la capacidad de unir sin uniformar ni imponer».También habló de estrategia: «Estamos identificados con la misión de promover el español en el mundo. Es una tarea cultural de primer orden, una acción social y política y económica». Y habló además de las lenguas cooficiales: «Trabajaremos para que las lenguas cooficiales tengan reconocimiento que merecen, empezando por la oficialidad en la UE».El voto hispano en EE. UU. y la inteligencia artificialEsta 26ª edición contiene además un artículo firmado por el propio Albares. Asimismo, se repasa la situación del español como lengua de herencia con especial atención a países como Estados Unidos, el Reino Unido, Francia, Alemania, Italia y Suiza. Este apartado incluye el estudio ‘La orientación del voto hispano en las elecciones presidenciales de Estados Unidos en 2024’, del Observatorio del Instituto Cervantes en la Universidad de Harvard, en el que se desmonta la narrativa mediática de un giro masivo del voto hispano hacia Donald Trump en 2024. También hay una reflexión sobre la relación entre la Inteligencia artificial y la lengua española elaborada por Elena González-Blanco García, directora de IA para EMEA Digital Natives en Microsoft, en la que se abordan los retos y las perspectivas de futuro de esta nueva tecnología en el campo del lenguaje. Por último, se ofrecen informes de actualidad sobre el Instituto Cervantes, como los dedicados a los cuarenta años del español como lengua extranjera o la evolución de la observación del español. Como conclusión se incluye un directorio que detalla la presencia del Instituto Cervantes en más de 100 ciudades de 52 países. En 2025, el Instituto Cervantes ha registrado 30 millones más de hablantes del español, un 5% más que el años anterior y por tanto la cifra total de personas con las que compartimos la lengua española sería de 630 millones potenciales. De ellos, 520 millones la tienen como lengua nativa, siendo el la tercera mayor del mundo, por detrás del chino y el hindi. Pero el español es más internacional, sin duda, ya que uno de cada diez hablantes nativos de español reside en países no hispanohablantes. El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, presentó ayer el anuario ‘El español en el mundo’, que edita el Instituto Cervantes. Le acompañaban su director, Luis García Montero, junto a los responsables de la publicación.Un informe más políticoEntre las novedades del Anuario 2025 destaca la incorporación de factores de la agenda política que el informe asocia a la lengua, como los «valores democráticos» o el «patriarcado». En los artículo reunidos bajo el título de «El español como expresión de valores democráticos» figuran textos como el que se centra en el machismo de la Constitución Española de 1978, de Ruth Rubio y Octavio Salazar, que van más allá de la lengua en sus análisis, incorporando debates de otros ámbitos. «Queríamos dar un paso más y no limitarnos al análisis lingüístico tradicional», ha dicho la catedrática de la Universidad de Sevilla, Ruth Rubio. Para ella «la Constitución sí es machista, totalmente», tal vez como la época en la que se redactó, y por eso «hay padres de la Constitución pero nunca se habla de las mujeres que participaron, no tiene madres». El texto analiza algunos aspectos de las expresiones utilizadas en la Carta Magna (les llaman la atención, por ejemplo que haya ‘reina consorte’ y ‘consorte de la reina’ en lugar de ‘rey consorte’), y también la ausencia de otros términos, como ‘cuidados’, que hoy seguramente serían incorporados, pero advierte que insistir en estos debates convierten estos temas en materia constitucional. La especialista va más allá cuando constata también que hay términos inventados como ‘ideología de género’, «en los que se mete todo lo que molesta a la familia tradicional», en un contexto global de ataques del movimiento ‘antigénero’ alentados por un ‘Trumpismo 2.0’, así definido.También con un mayor sesgo político, figuran estudios sobre el lenguaje claro, así como el papel de los medios y los bulos en la comunicación política o los sesgos de desigualdad en la Inteligencia Artificial. García Montero defendió este desarrollo de asuntos de la esfera pública en el estudio del idioma que hace el Cervantes anualmente, algo que «dibuja una imagen multifacética de la presencia del español» y ayuda «a la responsabilidad de los periodistas para no dejarse arrastrar en un mundo de bulos y falsas noticias».La lengua que uneEl director del Cervantes recibió también el espaldarazo del Gobierno que supone la presencia del ministro de Exteriores en el acto, después del conflicto generado en Arequipa. García Montero dijo al respecto que «el Cervantes hace su trabajo y se relaciona con la RAE, no ha roto ningún puente con la Academia, pero parece que molestó porque dije que prefería un filólogo al frente de la Academia».Albares valoró el anuario como una herramienta de diagnóstico, una publicación indispensable para conocer el estado de nuestra lengua. «La nuestra no es solo una lengua de cultura, también tiene un enorme valor político, geoestratégico y económico», dijo.«El español se ha hecho fuerte desde la diferencia y la inclusión y por ello constituye una reserva de los valores democráticos –añadió–. Una lengua es más que un código, también es un formidable vehículo para trasladar valores. Las lenguas deben ser siempre motivos de unión y nunca de discordia, deben acercar y no separar, y es lo que ha conseguido el español», subrayó. Y antes: «Tenemos la capacidad de unir sin uniformar ni imponer».También habló de estrategia: «Estamos identificados con la misión de promover el español en el mundo. Es una tarea cultural de primer orden, una acción social y política y económica». Y habló además de las lenguas cooficiales: «Trabajaremos para que las lenguas cooficiales tengan reconocimiento que merecen, empezando por la oficialidad en la UE».El voto hispano en EE. UU. y la inteligencia artificialEsta 26ª edición contiene además un artículo firmado por el propio Albares. Asimismo, se repasa la situación del español como lengua de herencia con especial atención a países como Estados Unidos, el Reino Unido, Francia, Alemania, Italia y Suiza. Este apartado incluye el estudio ‘La orientación del voto hispano en las elecciones presidenciales de Estados Unidos en 2024’, del Observatorio del Instituto Cervantes en la Universidad de Harvard, en el que se desmonta la narrativa mediática de un giro masivo del voto hispano hacia Donald Trump en 2024. También hay una reflexión sobre la relación entre la Inteligencia artificial y la lengua española elaborada por Elena González-Blanco García, directora de IA para EMEA Digital Natives en Microsoft, en la que se abordan los retos y las perspectivas de futuro de esta nueva tecnología en el campo del lenguaje. Por último, se ofrecen informes de actualidad sobre el Instituto Cervantes, como los dedicados a los cuarenta años del español como lengua extranjera o la evolución de la observación del español. Como conclusión se incluye un directorio que detalla la presencia del Instituto Cervantes en más de 100 ciudades de 52 países.
En 2025, el Instituto Cervantes ha registrado 30 millones más de hablantes del español, un 5% más que el años anterior y por tanto la cifra total de personas con las que compartimos la lengua española sería de 630 millones potenciales. De ellos, 520 millones … la tienen como lengua nativa, siendo el la tercera mayor del mundo, por detrás del chino y el hindi. Pero el español es más internacional, sin duda, ya que uno de cada diez hablantes nativos de español reside en países no hispanohablantes. El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, presentó ayer el anuario ‘El español en el mundo’, que edita el Instituto Cervantes. Le acompañaban su director, Luis García Montero, junto a los responsables de la publicación.
Un informe más político
Entre las novedades del Anuario 2025 destaca la incorporación de factores de la agenda política que el informe asocia a la lengua, como los «valores democráticos» o el «patriarcado». En los artículo reunidos bajo el título de «El español como expresión de valores democráticos» figuran textos como el que se centra en el machismo de la Constitución Española de 1978, de Ruth Rubio y Octavio Salazar, que van más allá de la lengua en sus análisis, incorporando debates de otros ámbitos.
«Queríamos dar un paso más y no limitarnos al análisis lingüístico tradicional», ha dicho la catedrática de la Universidad de Sevilla, Ruth Rubio. Para ella «la Constitución sí es machista, totalmente», tal vez como la época en la que se redactó, y por eso «hay padres de la Constitución pero nunca se habla de las mujeres que participaron, no tiene madres». El texto analiza algunos aspectos de las expresiones utilizadas en la Carta Magna (les llaman la atención, por ejemplo que haya ‘reina consorte’ y ‘consorte de la reina’ en lugar de ‘rey consorte’), y también la ausencia de otros términos, como ‘cuidados’, que hoy seguramente serían incorporados, pero advierte que insistir en estos debates convierten estos temas en materia constitucional.
La especialista va más allá cuando constata también que hay términos inventados como ‘ideología de género’, «en los que se mete todo lo que molesta a la familia tradicional», en un contexto global de ataques del movimiento ‘antigénero’ alentados por un ‘Trumpismo 2.0’, así definido.
También con un mayor sesgo político, figuran estudios sobre el lenguaje claro, así como el papel de los medios y los bulos en la comunicación política o los sesgos de desigualdad en la Inteligencia Artificial. García Montero defendió este desarrollo de asuntos de la esfera pública en el estudio del idioma que hace el Cervantes anualmente, algo que «dibuja una imagen multifacética de la presencia del español» y ayuda «a la responsabilidad de los periodistas para no dejarse arrastrar en un mundo de bulos y falsas noticias».
La lengua que une
El director del Cervantes recibió también el espaldarazo del Gobierno que supone la presencia del ministro de Exteriores en el acto, después del conflicto generado en Arequipa. García Montero dijo al respecto que «el Cervantes hace su trabajo y se relaciona con la RAE, no ha roto ningún puente con la Academia, pero parece que molestó porque dije que prefería un filólogo al frente de la Academia».
Albares valoró el anuario como una herramienta de diagnóstico, una publicación indispensable para conocer el estado de nuestra lengua. «La nuestra no es solo una lengua de cultura, también tiene un enorme valor político, geoestratégico y económico», dijo.
«El español se ha hecho fuerte desde la diferencia y la inclusión y por ello constituye una reserva de los valores democráticos –añadió–. Una lengua es más que un código, también es un formidable vehículo para trasladar valores. Las lenguas deben ser siempre motivos de unión y nunca de discordia, deben acercar y no separar, y es lo que ha conseguido el español», subrayó. Y antes: «Tenemos la capacidad de unir sin uniformar ni imponer».
También habló de estrategia: «Estamos identificados con la misión de promover el español en el mundo. Es una tarea cultural de primer orden, una acción social y política y económica». Y habló además de las lenguas cooficiales: «Trabajaremos para que las lenguas cooficiales tengan reconocimiento que merecen, empezando por la oficialidad en la UE».
El voto hispano en EE. UU. y la inteligencia artificial
Esta 26ª edición contiene además un artículo firmado por el propio Albares. Asimismo, se repasa la situación del español como lengua de herencia con especial atención a países como Estados Unidos, el Reino Unido, Francia, Alemania, Italia y Suiza. Este apartado incluye el estudio ‘La orientación del voto hispano en las elecciones presidenciales de Estados Unidos en 2024’, del Observatorio del Instituto Cervantes en la Universidad de Harvard, en el que se desmonta la narrativa mediática de un giro masivo del voto hispano hacia Donald Trump en 2024.
También hay una reflexión sobre la relación entre la Inteligencia artificial y la lengua española elaborada por Elena González-Blanco García, directora de IA para EMEA Digital Natives en Microsoft, en la que se abordan los retos y las perspectivas de futuro de esta nueva tecnología en el campo del lenguaje.
Por último, se ofrecen informes de actualidad sobre el Instituto Cervantes, como los dedicados a los cuarenta años del español como lengua extranjera o la evolución de la observación del español. Como conclusión se incluye un directorio que detalla la presencia del Instituto Cervantes en más de 100 ciudades de 52 países.
Artículo solo para suscriptores
RSS de noticias de cultura
