El Santuario Libertad fue el gran sueño de Frank Cuesta. Ubicado a varios kilómetros de Bangkok, el refugio nació como un espacio dedicado al rescate y rehabilitación de animales en peligro. Durante años, su creador no solo lo convirtió en su hogar, sino también en una fuente de ingresos. Sin embargo, hoy la situación es diferente: problemas legales, disputas familiares y una posible salida forzada han cambiado el panorama.
Durante un tiempo, el santuario no solo se sostenía con donaciones y suscripciones a sus canales de Twitch y YouTube, sino que también ofrecía visitas privadas que permitían a los viajeros conocer de cerca su labor. Estas experiencias no eran accesibles para todos: los precios oscilaban entre los 347 y los 1.997 euros, dependiendo del nivel de inmersión en la vida del santuario.
La opción más asequible, la visita exprés de medio día, costaba 347 euros por persona e incluía un recorrido guiado, el almuerzo y la posibilidad de conocer a Frank Cuesta. Sin embargo, si alguien quería algo más exclusivo, podía optar por la experiencia extendida, con interacción con los animales y una caminata nocturna, por 397 euros.
Pero la verdadera experiencia comenzaba en los paquetes de varios días. Con 747 euros, los visitantes podían pasar dos días en el santuario, recorrer la selva con Frank y contar con transporte de ida y vuelta a Bangkok. La opción Aventura XL, de 797 euros, añadía una camiseta firmada y la posibilidad de colaborar en algunas tareas del refugio.
Para quienes querían una inmersión total, el paquete más caro ofrecía cinco días en el santuario por 1.997 euros. Este plan, denominado Pasantía con Frank, incluía alojamiento premium, tareas diarias con los animales y un certificado de participación. Un acceso exclusivo a un universo desconocido para muchos.
A pesar del éxito de estos tours, la situación del santuario ha cambiado. Las disputas legales con su exmujer, Yuyee Alissa Intusmith, han puesto en riesgo su continuidad en el terreno. Tras años de conflicto, la propiedad pasó a nombre de Zorro, el hijo mayor de la pareja, pero las constantes denuncias de Yuyee han generado incertidumbre.
La financiación del santuario, que dependía en parte de estas visitas, hoy descansa sobre las contribuciones de sus seguidores. Frank Cuesta sigue enfrentando problemas legales en Tailandia, lo que podría obligarlo a dejar el refugio que tanto esfuerzo le costó levantar.
El futuro del Santuario Libertad es incierto, pero lo que está claro es que Frank Cuesta supo convertir su pasión en una experiencia única para quienes podían permitirse conocerla de cerca.
El Santuario Libertad, el refugio del herpetólogo en Tailandia, llegó a ofrecer exclusivas visitas privadas a precios sorprendentes. Ahora, todo está en el aire
El Santuario Libertad fue el gran sueño de Frank Cuesta. Ubicado a varios kilómetros de Bangkok, el refugio nació como un espacio dedicado al rescate y rehabilitación de animales en peligro. Durante años, su creador no solo lo convirtió en su hogar, sino también en una fuente de ingresos. Sin embargo, hoy la situación es diferente: problemas legales, disputas familiares y una posible salida forzada han cambiado el panorama.
Durante un tiempo, el santuario no solo se sostenía con donaciones y suscripciones a sus canales de Twitch y YouTube, sino que también ofrecía visitas privadas que permitían a los viajeros conocer de cerca su labor. Estas experiencias no eran accesibles para todos: los precios oscilaban entre los 347 y los 1.997 euros, dependiendo del nivel de inmersión en la vida del santuario.
La opción más asequible, la visita exprés de medio día, costaba 347 euros por persona e incluía un recorrido guiado, el almuerzo y la posibilidad de conocer a Frank Cuesta. Sin embargo, si alguien quería algo más exclusivo, podía optar por la experiencia extendida, con interacción con los animales y una caminata nocturna, por 397 euros.
Pero la verdadera experiencia comenzaba en los paquetes de varios días. Con 747 euros, los visitantes podían pasar dos días en el santuario, recorrer la selva con Frank y contar con transporte de ida y vuelta a Bangkok. La opción Aventura XL, de 797 euros, añadía una camiseta firmada y la posibilidad de colaborar en algunas tareas del refugio.
Para quienes querían una inmersión total, el paquete más caro ofrecía cinco días en el santuario por 1.997 euros. Este plan, denominado Pasantía con Frank, incluía alojamiento premium, tareas diarias con los animales y un certificado de participación. Un acceso exclusivo a un universo desconocido para muchos.
A pesar del éxito de estos tours, la situación del santuario ha cambiado. Las disputas legales con su exmujer, Yuyee Alissa Intusmith, han puesto en riesgo su continuidad en el terreno. Tras años de conflicto, la propiedad pasó a nombre de Zorro, el hijo mayor de la pareja, pero las constantes denuncias de Yuyee han generado incertidumbre.
La financiación del santuario, que dependía en parte de estas visitas, hoy descansa sobre las contribuciones de sus seguidores. Frank Cuesta sigue enfrentando problemas legales en Tailandia, lo que podría obligarlo a dejar el refugio que tanto esfuerzo le costó levantar.
El futuro del Santuario Libertad es incierto, pero lo que está claro es que Frank Cuesta supo convertir su pasión en una experiencia única para quienes podían permitirse conocerla de cerca.
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