Rodeados de patos en el delta del Ebro y pertrechados con prismáticos Quechua. Así comienza la entrevista que Gabriel Rufián ha concedido a Jordi Évole y en la que el político catalán reflexiona sobre su trayectoria, desde su adolescencia en Santa Coloma de Gramanet hasta su posible futuro en Esquerra Republicana (ERC), pasando por un presente en el que no escatima críticas al PSOE o a la derecha catalana.«Yo quería ser Arturo Pérez-Reverte . Hay mucha gente a la que quizá no la escucho, pero la leo». Es una de las inesperadas confesiones con las que Rufián ha sorprendido durante la entrevista, en la que ha confesado estar más interesado en quienes piensan diferente. «Lo conozco, es un buen tipo, curioso de conocer. Tenemos amigos comunes. En un impás me lo presentaron. Igual que he conocido a gente como Garci, que me parece un director con pelis maravillosas y en política estamos en las antípodas. Loquillo, también estamos en las antípodas, pero considero que tiene un talento brutal», ha cotinaudo. En una entrevista en la que ha abordado temas personales, como que le costó aprender a hablar y tuvo que ir al logopeda durante años, también ha cargado contra el PSOE, al que ha acusado de funcionar «como una ambulancia» . «Con (Pedro) Sánchez, la frase más repetida es ‘Atrévete’. Yo a él le dicho: ‘Atrévete, si te van a llamar golpista, secesionista, ladrón…», ha afirmado, antes de reconocer que, cuando ERC ha gobernado Cataluña, no han sido «valientes».Noticia Relacionada estandar No Gabriel Rufián dimite como concejal en Santa Coloma para centrarse en la política nacional ABC En línea con la dirección del partido, a partir de ahora se centrará «en exclusividad» en su labor como portavoz en el CongresoSobre la situación actual de la política española, ha lamentado que llegará «un ciclo de derecha y ultraderecha , desgraciadamente». «Tenemos que intentar que ser facha vuelva a dar vergüenza y, para eso, tiene que pasar un tiempo. Ser facha está de moda, ser racista. Lo que mola es ser un xenófobo, un machista. Eso es jodido. Lo primero que tienes que hacer es decirle a esta gente que se vanagloria de ser valientes es que no lo son. Es ‘bulllying’. No son patriotas. No es de patriotas odiar a la mitad de su país», ha señalado. En este análisis de la situación política nacional, también ha criticado el papel de los partidos antagónicos a ERC en su comunidad autónoma. «Igual que le pasa a la derecha española, la derecha catalana se piensa que Cataluña es suya. Siempre se comporta como un mal propietario, que te puede desahuciar, se cree que las instituciones son suyas . Le pasa a junts y a Convergencias», ha sentenciado. No obstante, Rufián también ha hecho autocrítica sobre la izquierda catalana y su propio comportamiento al frente y ha admitido el error de no «no cuidar a aquellos y aquellas que hablaban para los de fuera del independentismo». En este sentido, ha censurado que, en determinados momentos, los partidos separatistas han repartido «carnés de pureza» . «Hemos participado. Yo he participado. Me avergüenzo», ha admitido, antes de apuntar que no se dieron cuenta de que para convencer había que emplear «la seducción» y no «con palos».También a nivel personal, Rufián ha reflexionado sobre lo que ha supuesto para él convertirse en una de las caras más reconocidas de la política española. «He tenido un entorno que nunca me ha dejado que se me fuera la cabeza, pero en mi interior era un idiota. Me pensaba que era la hostia , que no eran justos conmigo, porque yo hacía y decía cosas geniales. Me pasó durante tiempo», ha reconocido.« Yo cada día domestico mi ego . Yo tengo el ego de un camión. Si no lo tuviera, no podría dedicarme a lo que me dedico. A la par, tengo muchas inseguridades que lo domestican. Ese síndrome de niño pobre. Tú no estás llamado a hacer esto. Quizá se acaba un día», ha admitido. Para cerrar la entrevista, Rufián se pronuncia sobre su futuro. «¿Has tocado techo?», le ha preguntado Évole, que le cuestiona sobre el tiempo que seguirá en activo. «Yo soy un enfermo de la política, me voy a morir pensando en política. Me cansa la dinámica de los partidos. Es lo que te acaba quemando, pero a mí la política me encanta. Me dedicaré el tiempo que aquellos que me pusieron me digan y mientras me compense ir con gorra y con mascarilla por la vida », le ha contestado.En cuanto a la posibilidad de concurrir a las elecciones catalanas como candidato de ERC a la Generalitat, ha dicho sentirse «sorprendido» de que cada vez más gente se lo pregunte. «No aspiro a eso y creo que quizá no sirvo. Aunque hay tantas cosas que creía que no iba a hacer y he hecho… Trabajo para que Junqueras lo sea algun día (…) Igual mañana estoy en un kiosco», ha negado. Sin embargo, Évole ha insistido: «¿Lo otro también puede pasar?». «No, qué va» , ha recalcado Rufián. Rodeados de patos en el delta del Ebro y pertrechados con prismáticos Quechua. Así comienza la entrevista que Gabriel Rufián ha concedido a Jordi Évole y en la que el político catalán reflexiona sobre su trayectoria, desde su adolescencia en Santa Coloma de Gramanet hasta su posible futuro en Esquerra Republicana (ERC), pasando por un presente en el que no escatima críticas al PSOE o a la derecha catalana.«Yo quería ser Arturo Pérez-Reverte . Hay mucha gente a la que quizá no la escucho, pero la leo». Es una de las inesperadas confesiones con las que Rufián ha sorprendido durante la entrevista, en la que ha confesado estar más interesado en quienes piensan diferente. «Lo conozco, es un buen tipo, curioso de conocer. Tenemos amigos comunes. En un impás me lo presentaron. Igual que he conocido a gente como Garci, que me parece un director con pelis maravillosas y en política estamos en las antípodas. Loquillo, también estamos en las antípodas, pero considero que tiene un talento brutal», ha cotinaudo. En una entrevista en la que ha abordado temas personales, como que le costó aprender a hablar y tuvo que ir al logopeda durante años, también ha cargado contra el PSOE, al que ha acusado de funcionar «como una ambulancia» . «Con (Pedro) Sánchez, la frase más repetida es ‘Atrévete’. Yo a él le dicho: ‘Atrévete, si te van a llamar golpista, secesionista, ladrón…», ha afirmado, antes de reconocer que, cuando ERC ha gobernado Cataluña, no han sido «valientes».Noticia Relacionada estandar No Gabriel Rufián dimite como concejal en Santa Coloma para centrarse en la política nacional ABC En línea con la dirección del partido, a partir de ahora se centrará «en exclusividad» en su labor como portavoz en el CongresoSobre la situación actual de la política española, ha lamentado que llegará «un ciclo de derecha y ultraderecha , desgraciadamente». «Tenemos que intentar que ser facha vuelva a dar vergüenza y, para eso, tiene que pasar un tiempo. Ser facha está de moda, ser racista. Lo que mola es ser un xenófobo, un machista. Eso es jodido. Lo primero que tienes que hacer es decirle a esta gente que se vanagloria de ser valientes es que no lo son. Es ‘bulllying’. No son patriotas. No es de patriotas odiar a la mitad de su país», ha señalado. En este análisis de la situación política nacional, también ha criticado el papel de los partidos antagónicos a ERC en su comunidad autónoma. «Igual que le pasa a la derecha española, la derecha catalana se piensa que Cataluña es suya. Siempre se comporta como un mal propietario, que te puede desahuciar, se cree que las instituciones son suyas . Le pasa a junts y a Convergencias», ha sentenciado. No obstante, Rufián también ha hecho autocrítica sobre la izquierda catalana y su propio comportamiento al frente y ha admitido el error de no «no cuidar a aquellos y aquellas que hablaban para los de fuera del independentismo». En este sentido, ha censurado que, en determinados momentos, los partidos separatistas han repartido «carnés de pureza» . «Hemos participado. Yo he participado. Me avergüenzo», ha admitido, antes de apuntar que no se dieron cuenta de que para convencer había que emplear «la seducción» y no «con palos».También a nivel personal, Rufián ha reflexionado sobre lo que ha supuesto para él convertirse en una de las caras más reconocidas de la política española. «He tenido un entorno que nunca me ha dejado que se me fuera la cabeza, pero en mi interior era un idiota. Me pensaba que era la hostia , que no eran justos conmigo, porque yo hacía y decía cosas geniales. Me pasó durante tiempo», ha reconocido.« Yo cada día domestico mi ego . Yo tengo el ego de un camión. Si no lo tuviera, no podría dedicarme a lo que me dedico. A la par, tengo muchas inseguridades que lo domestican. Ese síndrome de niño pobre. Tú no estás llamado a hacer esto. Quizá se acaba un día», ha admitido. Para cerrar la entrevista, Rufián se pronuncia sobre su futuro. «¿Has tocado techo?», le ha preguntado Évole, que le cuestiona sobre el tiempo que seguirá en activo. «Yo soy un enfermo de la política, me voy a morir pensando en política. Me cansa la dinámica de los partidos. Es lo que te acaba quemando, pero a mí la política me encanta. Me dedicaré el tiempo que aquellos que me pusieron me digan y mientras me compense ir con gorra y con mascarilla por la vida », le ha contestado.En cuanto a la posibilidad de concurrir a las elecciones catalanas como candidato de ERC a la Generalitat, ha dicho sentirse «sorprendido» de que cada vez más gente se lo pregunte. «No aspiro a eso y creo que quizá no sirvo. Aunque hay tantas cosas que creía que no iba a hacer y he hecho… Trabajo para que Junqueras lo sea algun día (…) Igual mañana estoy en un kiosco», ha negado. Sin embargo, Évole ha insistido: «¿Lo otro también puede pasar?». «No, qué va» , ha recalcado Rufián.
Rodeados de patos en el delta del Ebro y pertrechados con prismáticos Quechua. Así comienza la entrevista que Gabriel Rufián ha concedido a Jordi Évole y en la que el político catalán reflexiona sobre su trayectoria, desde su adolescencia en Santa Coloma de Gramanet hasta su posible futuro en Esquerra Republicana (ERC), pasando por un presente en el que no escatima críticas al PSOE o a la derecha catalana.
«Yo quería ser Arturo Pérez-Reverte. Hay mucha gente a la que quizá no la escucho, pero la leo». Es una de las inesperadas confesiones con las que Rufián ha sorprendido durante la entrevista, en la que ha confesado estar más interesado en quienes piensan diferente. «Lo conozco, es un buen tipo, curioso de conocer. Tenemos amigos comunes. En un impás me lo presentaron. Igual que he conocido a gente como Garci, que me parece un director con pelis maravillosas y en política estamos en las antípodas. Loquillo, también estamos en las antípodas, pero considero que tiene un talento brutal», ha cotinaudo.
En una entrevista en la que ha abordado temas personales, como que le costó aprender a hablar y tuvo que ir al logopeda durante años, también ha cargado contra el PSOE, al que ha acusado de funcionar «como una ambulancia». «Con (Pedro) Sánchez, la frase más repetida es ‘Atrévete’. Yo a él le dicho: ‘Atrévete, si te van a llamar golpista, secesionista, ladrón…», ha afirmado, antes de reconocer que, cuando ERC ha gobernado Cataluña, no han sido «valientes».
Sobre la situación actual de la política española, ha lamentado que llegará «un ciclo de derecha y ultraderecha, desgraciadamente». «Tenemos que intentar que ser facha vuelva a dar vergüenza y, para eso, tiene que pasar un tiempo. Ser facha está de moda, ser racista. Lo que mola es ser un xenófobo, un machista. Eso es jodido. Lo primero que tienes que hacer es decirle a esta gente que se vanagloria de ser valientes es que no lo son. Es ‘bulllying’. No son patriotas. No es de patriotas odiar a la mitad de su país», ha señalado.
En este análisis de la situación política nacional, también ha criticado el papel de los partidos antagónicos a ERC en su comunidad autónoma. «Igual que le pasa a la derecha española, la derecha catalana se piensa que Cataluña es suya. Siempre se comporta como un mal propietario, que te puede desahuciar, se cree que las instituciones son suyas. Le pasa a junts y a Convergencias», ha sentenciado.
No obstante, Rufián también ha hecho autocrítica sobre la izquierda catalana y su propio comportamiento al frente y ha admitido el error de no «no cuidar a aquellos y aquellas que hablaban para los de fuera del independentismo». En este sentido, ha censurado que, en determinados momentos, los partidos separatistas han repartido «carnés de pureza». «Hemos participado. Yo he participado. Me avergüenzo», ha admitido, antes de apuntar que no se dieron cuenta de que para convencer había que emplear «la seducción» y no «con palos».
También a nivel personal, Rufián ha reflexionado sobre lo que ha supuesto para él convertirse en una de las caras más reconocidas de la política española. «He tenido un entorno que nunca me ha dejado que se me fuera la cabeza, pero en mi interior era un idiota. Me pensaba que era la hostia, que no eran justos conmigo, porque yo hacía y decía cosas geniales. Me pasó durante tiempo», ha reconocido.
«Yo cada día domestico mi ego. Yo tengo el ego de un camión. Si no lo tuviera, no podría dedicarme a lo que me dedico. A la par, tengo muchas inseguridades que lo domestican. Ese síndrome de niño pobre. Tú no estás llamado a hacer esto. Quizá se acaba un día», ha admitido.
Para cerrar la entrevista, Rufián se pronuncia sobre su futuro. «¿Has tocado techo?», le ha preguntado Évole, que le cuestiona sobre el tiempo que seguirá en activo. «Yo soy un enfermo de la política, me voy a morir pensando en política. Me cansa la dinámica de los partidos. Es lo que te acaba quemando, pero a mí la política me encanta. Me dedicaré el tiempo que aquellos que me pusieron me digan y mientras me compense ir con gorra y con mascarilla por la vida», le ha contestado.
En cuanto a la posibilidad de concurrir a las elecciones catalanas como candidato de ERC a la Generalitat, ha dicho sentirse «sorprendido» de que cada vez más gente se lo pregunte. «No aspiro a eso y creo que quizá no sirvo. Aunque hay tantas cosas que creía que no iba a hacer y he hecho… Trabajo para que Junqueras lo sea algun día (…) Igual mañana estoy en un kiosco», ha negado. Sin embargo, Évole ha insistido: «¿Lo otro también puede pasar?». «No, qué va», ha recalcado Rufián.
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