Sabrina Carpenter (Pensilvania, Estados Unidos, 26 años) ha desatado, una vez más, una ola de críticas por su imagen atrevida y provocativa. La cantante aprovechó su paso por el programa Saturday Night Live el pasado 18 de octubre, donde fue presentadora e invitada musical, para aclarar con su característico humor e ironía que quiere ser conocida por algo más que por ser sexualmente provocativa: “Ya que estoy aquí, quiero aclarar algunas ideas erróneas que la gente tiene sobre mí”, dijo Carpenter. “Todo el mundo me ve como una estrella del pop salida, pero en realidad soy mucho más que eso. No solo estoy cachonda. También estoy muy excitada y con una gran carga sexual. Y me encanta leer. Mi libro favorito es la enciclopedia. Es tan grande y tan dura…”, bromeó.
La artista desató la polémica el pasado 11 de junio con el estreno de la portada de su álbum Man’s Best Friend (la mejor amiga del hombre). Una imagen en la que está vestida con un minivestido negro a cuatro patas mientras un hombre, fuera del cuadro, le tira del pelo. “A algunos les asustó un poco la portada. No sé por qué”, dijo sobre el disco. “Solo aparecía yo a cuatro patas con una figura invisible tirándome del pelo. Pero lo que la gente no se da cuenta es que así es como la recortaron. Si se aleja la imagen, es claramente una foto del especial del 50º aniversario del programa, es Bowen [Yang] ayudándome a levantarme del pelo después de que Martin Short me empujara fuera de la fila del bufé diciendo algo como: ‘Papá necesita su miniquiche”, dijo con humor mientras mostró una foto editada de una portada alternativa de su disco.
“Hay una persona real debajo de todos los brillos, las pelucas y los corsés”, siguió con el monólogo. “Y otra cosa que quizá no sepas de mí es que me encanta interactuar con el público durante mi espectáculo”, aseguró. La ganadora de tres premios Grammy, conocida por coquetear, en broma, con espectadores en sus actuaciones, hizo una parodia de las dinámicas de sus conciertos con un hombre en el público. Después de preguntarle su nombre y de dónde era, Carpenter contestó: “¡Oh, qué lugar tan sexi y peculiar! ¿Ven?, me encanta hablar con gente normal. Son tan fascinantes cuando son reales como tú”. Y continuó: “Lo último que me gusta hacer en mis conciertos es arrestar a alguien por ser atractivo. ¿A quién puedo arrestar esta noche?”. Las actrices Millie Bobby Brown y Margaret Qualley, por ejemplo, son algunas de las celebridades que han sido esposadas en los conciertos de Carpenter. A principios de octubre también se viralizó el momento en el que la cantante le propone ser esposado al actor y músico Joe Keery, con quien compartió una química especial.
Sabrina Carpenter arresting DJO (Joe Keery) for ‘Juno’ at Austin City Limits.pic.twitter.com/05ekz2UQgq
— Sabrina Carpenter Daily (@SCdailyupdates) October 5, 2025
Aunque a algunos les divierte el sentido del humor de la intérprete de temas como Espresso o Manchild, su personalidad atrevida ha causado que las opiniones se dividan. La cantante, con más de 76 millones de oyentes mensuales en Spotify, ha sido acusada en redes sociales, en ocasiones anteriores, de promover la sexualización femenina con estereotipos anticuados.
Sin embargo, Carpenter está acostumbrada a defenderse de estas críticas y ya lo ha hecho públicamente en más de una ocasión. En una entrevista para Rolling Stone publicada en junio, con un tono más serio, pero sin perder su característico humor, defendió así su música: “Siempre me resulta muy gracioso cuando la gente se queja. Dicen: ‘Todo lo que hace es cantar sobre esto [sexo]’. Pero esas son las canciones que se han hecho populares. Claramente, te encanta el sexo. Estás obsesionada con él”. En cualquier caso, Sabrina Carpenter es un genio del marketing, y, además de tener a todo el mundo pendiente de lo que dice y hace, ha reabierto el debate en torno al sexo, la sexualidad y el escrutinio sobre las artistas femeninas.
La cantante ha vuelto a hablar sobre la polémica portada de su álbum ‘Man’s Best Friend’ en su paso por el programa ‘Saturday Night Live’: “A algunos les asustó un poco. No sé por qué. Solo aparecía yo a cuatro patas con una figura invisible tirándome del pelo”
La cantante ha vuelto a hablar sobre la polémica portada de su álbum ‘Man’s Best Friend’ en su paso por el programa ‘Saturday Night Live’: “A algunos les asustó un poco. No sé por qué. Solo aparecía yo a cuatro patas con una figura invisible tirándome del pelo”
Sabrina Carpenter (Pensilvania, Estados Unidos, 26 años) ha desatado, una vez más, una ola de críticas por su imagen atrevida y provocativa. La cantante aprovechó su paso por el programa Saturday Night Live el pasado 18 de octubre, donde fue presentadora e invitada musical, para aclarar con su característico humor e ironía que quiere ser conocida por algo más que por ser sexualmente provocativa: “Ya que estoy aquí, quiero aclarar algunas ideas erróneas que la gente tiene sobre mí”, dijo Carpenter. “Todo el mundo me ve como una estrella del pop salida, pero en realidad soy mucho más que eso. No solo estoy cachonda. También estoy muy excitada y con una gran carga sexual. Y me encanta leer. Mi libro favorito es la enciclopedia. Es tan grande y tan dura…”, bromeó.
La artista desató la polémica el pasado 11 de junio con el estreno de la portada de su álbum Man’s Best Friend (la mejor amiga del hombre). Una imagen en la que está vestida con un minivestido negro a cuatro patas mientras un hombre, fuera del cuadro, le tira del pelo. “A algunos les asustó un poco la portada. No sé por qué”, dijo sobre el disco. “Solo aparecía yo a cuatro patas con una figura invisible tirándome del pelo. Pero lo que la gente no se da cuenta es que así es como la recortaron. Si se aleja la imagen, es claramente una foto del especial del 50º aniversario del programa, es Bowen [Yang] ayudándome a levantarme del pelo después de que Martin Short me empujara fuera de la fila del bufé diciendo algo como: ‘Papá necesita su miniquiche”, dijo con humor mientras mostró una foto editada de una portada alternativa de su disco.
“Hay una persona real debajo de todos los brillos, las pelucas y los corsés”, siguió con el monólogo. “Y otra cosa que quizá no sepas de mí es que me encanta interactuar con el público durante mi espectáculo”, aseguró. La ganadora de tres premios Grammy, conocida por coquetear, en broma, con espectadores en sus actuaciones, hizo una parodia de las dinámicas de sus conciertos con un hombre en el público. Después de preguntarle su nombre y de dónde era, Carpenter contestó: “¡Oh, qué lugar tan sexi y peculiar! ¿Ven?, me encanta hablar con gente normal. Son tan fascinantes cuando son reales como tú”. Y continuó: “Lo último que me gusta hacer en mis conciertos es arrestar a alguien por ser atractivo. ¿A quién puedo arrestar esta noche?”. Las actrices Millie Bobby Brown y Margaret Qualley, por ejemplo, son algunas de las celebridades que han sido esposadas en los conciertos de Carpenter. A principios de octubre también se viralizó el momento en el que la cantante le propone ser esposado al actor y músico Joe Keery, con quien compartió una química especial.
Aunque a algunos les divierte el sentido del humor de la intérprete de temas como Espresso o Manchild, su personalidad atrevida ha causado que las opiniones se dividan. La cantante, con más de 76 millones de oyentes mensuales en Spotify, ha sido acusada en redes sociales, en ocasiones anteriores, de promover la sexualización femenina con estereotipos anticuados.
Sin embargo, Carpenter está acostumbrada a defenderse de estas críticas y ya lo ha hecho públicamente en más de una ocasión. En una entrevista para Rolling Stone publicada en junio, con un tono más serio, pero sin perder su característico humor, defendió así su música: “Siempre me resulta muy gracioso cuando la gente se queja. Dicen: ‘Todo lo que hace es cantar sobre esto [sexo]’. Pero esas son las canciones que se han hecho populares. Claramente, te encanta el sexo. Estás obsesionada con él”. En cualquier caso, Sabrina Carpenter es un genio del marketing, y, además de tener a todo el mundo pendiente de lo que dice y hace, ha reabierto el debate en torno al sexo, la sexualidad y el escrutinio sobre las artistas femeninas.
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