En su nueva etapa en TVE, Andreu Buenafuente ha decidido hacer con Futuro imperfecto un late night diferente a los formatos los que ha sido conocido en las últimas décadas en distintas cadenas. Ahora el centro es un largo monólogo que da pie a otros momentos, y ya no cuenta con un entrevistado al uso haciendo promoción. Eso da a esta nueva (y exitosa) etapa en La 1 espacio para contar con invitados atípicos en este tipo de espacios, replicando algo que ha funcionado en La revuelta. Este jueves, el programa dio voz, por ejemplo, a las anécdotas de Kandy García, una mujer de 90 años que ha viajado a más de 80 países y que sigue dando la vuelta al mundo y contándolo en redes sociales con el sobrenombre de la abuelita mochilera.
‘Futuro imperfecto’ invita a la vallisoletana que tiene más de 80 países recorridos: “Como tengo muchos años, me tengo que dar prisa”
‘Futuro imperfecto’ invita a la vallisoletana que tiene más de 80 países recorridos: “Como tengo muchos años, me tengo que dar prisa”


En su nueva etapa en TVE, Andreu Buenafuente ha decidido hacer con Futuro imperfecto un late night diferente a los formatos los que ha sido conocido en las últimas décadas en distintas cadenas. Ahora el centro es un largo monólogo que da pie a otros momentos, y ya no cuenta con un entrevistado al uso haciendo promoción. Eso da a esta nueva (y exitosa) etapa en La 1 espacio para contar con invitados atípicos en este tipo de espacios, replicando algo que ha funcionado en La revuelta. Este jueves, el programa dio voz, por ejemplo, a las anécdotas de Kandy García, una mujer de 90 años que ha viajado a más de 80 países y que sigue dando la vuelta al mundo y contándolo en redes sociales con el sobrenombre de la abuelita mochilera.
“Yo siempre tengo prisa. Como tengo muchos años, me tengo que dar prisa”, bromeaba al presentarse esta vallisoletana que era abogada antes de esta aventura. Fue en su jubilación cuando decidió cumplir un sueño de juventud, cuando con 21 años conoció en el cámping de sus padres en Oiartzun (Gipuzkoa) a un extranjero que estaba dando la vuelta al mundo. Cuando acabó con el trabajo, decidió ponerse a viajar y replicar esa experiencia ella misma. Una y otra vez.
“Yo iba siempre sola con la mochila”, contó esta mujer que ha dado tres o cuatro veces (no se acuerda ya cuántas) la vuelta al mundo y publicado el libro Abuelita mochilera: vuelta al mundo en solitario: “En India me pilló un monzón. Yo viajaba en autobuses públicos, y me subía arriba porque dentro hacía mucho calor. Cuando empezó a llover, los indios se tiraron. Yo me quedé agarradita a la mochila, y por suerte el tren logró frenar al borde de un río… hubiera sido fatal y me comencé a asustar un poco. Por la noche yo le dije a la mochila, porque no tenía a nadie más: ‘¿no te parece que ya está bien?’. Y mi mochila, que era muy comprensiva, dijo: ‘Lo veo una tontería, si esto no va a repetirse, y tú tienes que acabar la vuelta al mundo’. Y me convenció“, compartió García, cuya primera vuelta al mundo comenzó en Buenos Aires (Argentina).
Con 80 años, su hijo le dijo, sin embargo, que no viajara más sola, y empezó a hacerlo con otras mujeres. Por las noches se ven y se cuentan sus vidas y trayectos, una terapia para las viajeras. Su próximo viaje será, contó a Buenafuente, Camboya, no por ver los templos que “todo el mundo visita”, sino la “maravilla de paisajes, de palafitos y lagos”. Con su presencia, Futuro imperfecto marcó este jueves un 11,1% de cuota de pantalla y logró 979.000 espectadores de media, solo por debajo de Supervivientes.
¿Con qué sitio se quedaría Kandy García? “En Uluru, Australia, van los aborígenes a cargarse las energías, y allí está la montaña que cambia de color y que respira. Solo quería ver eso, no las playas. Veía llegar allí a los turistas y sin más, pero yo veía a un aborigen observando. Nos miramos, nos sonreímos y nos acercamos para hablar. Me dijo: ‘¿usted busca la montaña que habla?’ Le dije que sí, y anduvimos 20 minutos hasta la parte opuesta, donde había un agujero con agua dentro. Y me dijo: ‘cuando pongo el oído, y oigo… y no puedo creerlo’. Yo me quedé atónita. Pienso hoy que tengo mucha energía, y creo que me recargué de energía ahí″.
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